Acerca de Aleatorio
En Aleatorio Revista no queremos ser condescendientes, creemos y confiamos en las virtudes y capacidades de cada lector, no le daremos periodismo masticado. Al interior nuestro se mueven distintas perspectivas y corrientes que chocan formando nuevas alternativas, distintas perspectivas y nuevos discursos. Nos enriquecemos. Esa es nuestra propuesta. No hay causas finales, nuestra única pretensión es que tú descubras y aprendas algo al leernos, que cuando suceda te lleves algo y nos dejes algo.
Lo Aleatorio tiene como rasgo la propia libertad, la no sujeción. Ser aleatorio significa escaparse, estar en constante fuga, no determinarse, no agotarse. Es darse cuenta que no hay nada ya escrito, que los pronósticos son para los conservadores, que la vida en toda su complejidad en imprevisible, es ser y no ser al mismo tiempo, desdecirse. Pero representa también movimiento, dinamismo. Lo que usted encontrará en Aleatorio Revista, es un cúmulo constante y diverso de distintas manifestaciones humanas, culturales por tanto.
El humano es creador, luego entonces artista. Creador de la más intima conexión universal: la música y su eterna compañera la danza. Artífice del profundo drama de las representaciones teatrales. Hacedor de palabras, poesía, narrativa, historia, misterio y pasiones, literatura.
Lo científico y lo tecnológico no son menos creativas que lo artístico, y vaya que hacen uso de lo Aleatorio. Hoy por hoy la ciencia ocupa un lugar centralísimo en los avatares de lo humano. Por tanto sería un tanto irresponsable no otorgarle cabida en nuestras páginas.
Quizás uno de los rubros de la cotidianidad humana donde es mucho más visible lo Aleatorio es en el deporte, por más que Lionel Messi o Tom Brady o cualquier atleta aplique el total de sus facultades, siempre habrá una serie de variables abrumadoras que inciden no sólo en el resultado de un juego sino en cada acción al interior de las canchas. Una serie de acciones y decisiones que juegan para que un esférico entre en una meta o un ovoide sea atrapado por un par de manos. Lo deportivo también juega en cancha de Aleatorio.
Una mezcla de todo lo anterior: cine, música, literatura, teatro, danza, ciencia, tecnología y deporte se unen, formando una suerte de arte total. Todo ello lo encontrará en Aleatorio.
Así pues, Aleatorio se dispone a crear y esparcir, para que usted amable lector, tome lo que le venga bien en ese instante o lo deje para otro momento de mayor tranquilidad. Somos perfectamente conscientes de que en este mundo virtual el hecho de que usted lea esto es en gran medido obra, de lo Aleatorio.
Hugo Cobián y Germán Chacón

Aleatorio: Cómo empezó todo
Cuando el Profesor Juan Carlos Romero mencionó que debíamos de hacer una revista digital entre todo el grupo y manejarla de forma similar a un periódico, le contestamos que nos diera tiempo desde ese día, que sabíamos lo difícil que nos iba a ser ponernos de acuerdo. El comentó que después lo haríamos, que no debía de ser difícil. El primer día que intentamos comenzar con la definición de la revista, nuestra línea editorial, el público al que nos dirigiríamos y los contenidos a tratar, fue, yo diría, desastroso: hubo un sinfín de desacuerdos y eran aún más las ideas que no dejaban de llegar. Éramos 18 mentes intentando volverse una con un evidente problema de disensión.
Seguimos intentando un par de semanas, continuamos en la búsqueda de algo que nos permitiera satisfacer todas nuestras exigencias personales y que aun así funcionáramos como una maquinaria de reloj. Fue más que complicado. Lo primero que se pudo acordar fue la edad de nuestro público (personas de entre 18 y 30 años) basándonos en las edades de quienes escribiríamos en la revista, pero teniendo en mente que tal vez nos leería un rango mayor.
Lo segundo fue la línea editorial, la cual se enfocaría en la investigación crítica y la formalidad dentro del contenido. Posteriormente vinieron los contenidos, donde prácticamente cada quien dijo “yo quiero escribir sobre esto” y así se fueron acomodando las secciones (Música, Deporte, Cultura y Ciencia y Tecnología), de esta forma todos nos sentiríamos cómodos escribiendo y por lo tanto lo haríamos mejor. Probablemente solo quisimos evitar más discusiones al respecto.
Posteriormente hicimos un organigrama sobre qué posición y obligaciones tendría cada quien y cual sería nuestro proceso para una publicación constante y bien formada. De esta forma, evitaríamos discusiones largas en un futuro y aceleraríamos nuestros procedimientos. Lo más difícil fue lo último: el nombre. Hubo muchas opciones y dentro de ellas se encontraba esta palabra Aleatorio. Era perfecta, pareciera que de hecho así funcionamos, como en una clase de azar que de forma misteriosa funciona para todos. No es que decidamos al azar nuestros contenidos, para nada, en verdad pensamos sobre la importancia y el impacto real de los temas que se tratarán en la revista; sin embargo, somos 18 mentes que se interesan por miles de cosas distintas y queremos tener la opción de saciar nuestra curiosidad. De la misma palabra que escogimos llevar por nombre, surge la sección Aleatorio: una sección extra con temas de otras índoles fuera de las primeras secciones establecidas, pero de gran importancia.
Para la tercera semana ya se había escogido un logo, uno que fuera sencillo e identificable, formal y que a la vez expresará aleatoreidad. Para la cuarta semana ya teníamos diseñada nuestra plataforma y las primeras publicaciones previstas.
Probablemente esto no sea de gran interés para el público, pero nosotros buscamos la mejor forma de organización al crear esta revista para poder generar una publicación que sea de interés general y esperamos que así sea.